La fachada pegada o de aplacado amorterado es uno de los sistemas constructivos más populares para el revestimiento de fachadas. Esto se debe a varios aspectos, entre ellos el estético y su buen mantenimiento. Pero todavía hay más. ¡Te los explicamos a continuación con más detalle!

Aunque las fachadas pegadas pueden resultar algo más caras que un simple enfoscado pintado o un mortero monocapa, son muy demandadas debido a la gran calidad que ofrecen, la durabilidad y buen mantenimiento, así como la resistencia a las inclemencias meteorológicas y los cambios de temperatura.

¿Cómo se construye una fachada pegada?

Esta técnica constructiva consiste en el pegado de las baldosas sobre el cerramiento exterior del edificio. Sobre el muro existente, bien sea de ladrillo, bloque u hormigón, se coloca al aplacado de baldosas cerámicas, de piedra natural o artificial. Para ello se debe utilizar siempre un mortero adecuado y específico para tal uso. Además, debe colocarse anclajes de seguridad para evitar desprendimientos de las placas con el paso del tiempo. Estos anclajes para fachadas pegadas podrán ser de acero inoxidable o aluminio, evitándose siempre el acero cincado o galvanizado. Es muy importante emplear siempre materiales adecuados y de gran calidad a la hora de construir una fachada pegada.

¿Qué materiales se emplean en las fachadas pegadas?

Son distintos los materiales que se pueden escoger para el revestimiento de las fachadas pegadas. Pero como ya hemos dicho los más populares son el gres porcelánico y la piedra natural.

Fachadas pegadas de gres porcelánico

Las fachadas pegadas porcelánicas están muy de moda desde hace unos años debido a su estética moderna, elegante y minimalista. El mantenimiento de este material es muy sencillo ya que el gres porcelánico permanece casi inalterable a lo largo del tiempo, conservando su aspecto original gracias a su resistencia a los agentes químicos y a las inclemencias meteorológicas como las heladas. Además, su porosidad casi nula facilita la limpieza de manchas o grafitis.

Fachadas pegadas de piedra natural

Las fachadas pegadas de piedra natural son muy apreciadas por su apariencia elegante y robusta, pero también por su gran resistencia y versatilidad. Aunque sus características dependerán siempre del tipo de piedra elegida. Los granitos y basaltos tienen gran dureza y baja porosidad, mientras que entre los mármoles, calizas y areniscas existe una gran variabilidad. Deberá tenerse en cuenta todos los condicionantes de la obra antes de elegir la piedra adecuada, especialmente la situación y metereología de la zona.
En definitiva, ahora ya sabes qué es un aplacado amorterado o fachada pegada, cómo se construye y qué materiales puedes escoger para el revestimiento de tu edificio.